Traducción: Marinella Reumann
Difusión: El Manantial del Caduceo en la Era del Ahora
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No es ningún monstruo debajo de la cama o incluso el miedo a la muerte lo que nos paraliza a la mayoría de nosotros. Es nuestro temor a lo desconocido, siempre presente, tan arraigado profundamente que debido a eso nos transformamos en racistas, nos aislamos, nos quedamos atrapados en nuestra vieja rutina debido a eso.
Por supuesto, nosotros argumentamos que es natural tener miedo a lo desconocido. Pero, ¿lo es? ¿No es lo desconocido un lugar de crecimiento? ¿Habríamos podido renunciar alguna vez a gatear y haber aprendido a caminar si el miedo a lo desconocido estuviese arraigado a nosotros? En realidad, los bebes y los niños pequeños, prueban todo lo que no le es familiar, y generalmente lo hacen a través de su boca.
Luego de estar viajando por algún tiempo, finalmente estoy en casa, por lo que decidí comenzar a practicar Yoga. Me puse la ropa de yoga, conduje hasta el estudio más cercano ´Yoga One´- imaginando la quietud y la espiritualidad del yoga, acompañando a los participantes con la pacífica vista de las estatuas de Buda. Ellos no tuvieron clase en ese momento, así que tomé mi Mat y me dirigí a otro estudio.-Uno cuyo nombre me intimidaba: ´Core Power Yoga´ (Núcleo de Energía del Yoga) – que ofrece el Hot Yoga (Yoga Caliente) en una habitación a 110 °F (43 °C). Ustedes tienen que entender que yo no tengo precisamente un cuerpo de yoga. Mi pronunciada inclinación hacia delante parece un camino doblado a la mitad. Es entonces cuando el miedo a lo desconocido elevó su voz. Yo lo reconocí de inmediato, ya que él habló en mi cabeza, ´Jonette, ¿tú realmente piensas que TÚ puedes hacer Hot, Power Yoga? ¿No prefieres ir a la casa y encontrar una clase fácil en YouTube? .
El temor de Jonette a lo desconocido, siguió hablando en mi cabeza a medida que continuaba mi camino hacia el intimidante estudio y me registraba en la clase que estaba por comenzar en tan solo tres minutos.
Okey, lo hice y ni una sola persona se rió de mí cuando mi pose de águila colapsó, o mi cobra parecía más a una carretera de la muerte. Al final de la clase más larga y más caliente que jamás había tomado, yo incluso prometí volver. Pero la próxima vez que vaya, llevaré una toalla.
En fin, no importa lo valiente que tú seas, lo que cuenta es el número de veces que el miedo persistente a lo es conocido no te permite probar cosas nuevas, que, de ningún modo son peligrosas o pavorosas.
Inténtalo y déjame saber cómo te va…
Copyright 2016 Jonette Crowley. www.JonetteCrowley.com