viernes, abril 08, 2022

Kryon por Lee Carroll - Egipto 14 - Descubrimiento del Yo Parte 11 - Isla de Philae, Templo de Isis– marzo 20, 2022


Canalización de Kryon por Lee Carroll

Egipto 14 – Isla de Philae, Templo de Isis– marzo 20, 2022

Descubrimiento del Yo – Parte 11 

 

Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.

El grupo ante mí está aquí para presenciar una salida del sol. El comienzo de la luz. Algo tan especial para los antiguos egipcios, porque la luz siempre llegaba en su ciclo, y jugaba dentro de una filosofía; no necesariamente en una religión espiritual; era su vida que el sol siempre apareciera, y el sol representaba lo que era la creación. Participaba dentro de lo que ellos creían con tanta fuerza; la diferencia entre este y oeste era vida y muerte.

Y aquí están ustedes, de cara a lo que ellos vieron, lo que ellos eran. Este templo de Isis en particular, una reubicación, pero la intención es la misma. ¿Han notado la fuerza y el poder de las mujeres en Egipto? Podrían echar una mirada sobre todo lo que hay, y decir, “Bueno, esta cultura era un mundo de hombres también.” No necesariamente; no siempre. Isis es un ejemplo. Y ella tenía muchas clases de nombres, ya fuera la diosa de la luna, o si era la que protegía a los niños, hasta se podría decir que era la diosa de la salud. Y entonces de eso queremos hablar ahora.

Es una cosa crítica, lo que sigue, y algo que suele entenderse mal; no es comprendido por muchos. Incluso si yo les hablo de estas cosas, igual no se entienden a tal grado que ustedes le encuentren sentido o las usen. Pero igual pueden recibir la información.

También quiero señalar, incluso antes de que empiece el mensaje de Wo, que los egipcios sabían sobre sanación. Ellos tenían muchos métodos de sanación esotéricos. Las mismas clases de hoy, que llamamos medicina alternativa y ustedes llaman medicina alternativa, era practicada entonces como la medicina principal. Incluía cosas como aromaterapia, cirugías, y sonido. Miles de años atrás, ellos entendían de estas cosas, que tus culturas y tus sociedades recién empiezan a descubrir. Es algo que hace preguntarse qué más tenían, que nosotros, ustedes, todos los que están aquí hoy, están empezando a descubrir.

Wo se presenta ante Yu Sha una vez más. Y Yu Sha lo mira y dice “Vamos a hacer un repaso, pero en ese repaso vamos a presentar algo muy especial, Wo. Algo que no es comprendido, Wo. Incluso mientras te hablo, en esta cultura, en estos días modernos, Wo, todavía no es comprendido. No solo no es comprendido, ni siquiera es aceptado como verdad. Pero te contaré al respecto, de todos modos. Deseamos repasar por un momento lo que te dije sobre tu cuerpo y tus células: que tu cuerpo es un sistema construido para la vida, que se rejuvenece a sí mismo todo el tiempo, está hecho para durar muy, muy largo tiempo, pero no sin dirección. Te dimos el ejemplo de la fábrica, hace mucho al comenzar, la fábrica que podía producir ese producto llama “L” que dijimos que era la vida (N.T. life), y todas las partes de la fábrica y los que trabajan en la fábrica conocen sus tareas. Pero necesitaba administración, necesitaba dirección. Y sin eso, la fábrica se volvió disfuncional. Y hubo problemas en la fábrica, y hubo desequilibrio en ella (N.T. original dis-ease, falta de facilidad, juego de palabras con disease, enfermedad), hasta que un día la fábrica se detuvo, cuando ya no pudo fabricar el producto porque no había nadie a cargo.

Y esta es nuevamente la metáfora que les presentamos, y les decimos que este desequilibrio es exactamente lo que suena (enfermedad). El cuerpo está diseñado para la vida, pero también está diseñado para tener dirección, y eso es tu consciencia, teniendo esa energía que hemos descripto una y otra vez, que necesita ser dirigida diariamente hacia el cuerpo. Tú eres el gerente de tu fábrica, que necesita eso: necesita que le digan aquí y allá. Y la razón de que esto sea tan misterioso para muchos, es que el ser humano lo mira y dice “No entendemos de biología; no somos médicos, ¿cómo vamos a poder decirle al cuerpo qué debe hacer?”

Una mujer yace en un hospital – esto es una metáfora, una parábola dentro de la parábola, si lo desean – y tiene una enfermedad. Y el médico dice que la está matando y no le queda mucho tiempo. Y en el hospital, ella tiene un despertar, y de algún modo ella se da cuenta de que todo lo que necesita hacer es relajarse y poner intención, y todo estará bien. Ella reconoce esto, en otras palabras, es una creencia firme, no una esperanza. No es algo que va a probar. E incluso en esa chispa de paz que ella tiene, ella no dice nada a su cuerpo, solo se relaja y siente al Dios interior. Y de pronto, hay algo llamado remisión espontánea. De algún modo, de alguna manera, el cuerpo ha eliminado esa cosa que estaba matándola. Y lo hizo por sí mismo, lo hizo a través de su intuición, ni siquiera por una dirección, ni por una meditación, ni siquiera una verbalización para sanar. ¡Lo hizo por sí mismo! Y ella se va de ese lugar sin la enfermedad, y esta nunca regresa.

Ahora bien, les acabo de dar un ejemplo de algo que ha sucedido una y otra y otra vez en la humanidad. Y esto debiera darles algo; debiera darles la verdad: que este cuerpo de ustedes sabe mucho más que lo que ustedes le atribuyen. Pero a menos que ustedes le den algo de intención y dirección, va a ir y entrar en una enfermedad. Será uno de los que se contagia todo lo que circula, debido a eso.

Wo pensó un momento y dijo: “¿Quieres decir que hablas de sanación?” Y Yu Sha dijo: “Más que eso; estamos describiendo una manera de vivir. Consciencia de rejuvenecimiento; no sanación. La sanación es algo que ocurre después que tienes la enfermedad, o después de tener el problema. Pero la consciencia puede conservarlo sano, para que nunca tengas que sanarlo. Lo que tienes que hacer es dirigirlo.

Wo, voy a contarte un secreto: tú y tu consciencia, con directivas diarias, pueden conservar tu cuerpo libre de enfermedades y todas las otras cosas que lo atacan incluso por la edad serán silenciadas. Y no solo vivirás más tiempo, como dije antes, sino que puedes estar sano.

Y para quienes no tienen esta información, y han entrado en la enfermedad, o en una salud deficiente, esta información es que hay milagros. Observan al cuerpo hacerlo por sí mismo, ¿qué creen que haría si tuviera dirección? Wo, tú eres tu propio sanador, eres tu propio médico, sin saber nada de medicina ni de química.”

Wo dijo: ¿Cómo puedo al menos empezar? ¿En qué pienso? ¿Qué dirijo? ¿Cómo le digo algo a mi cuerpo? Y Yu Sha miró a Wo y dijo “¿Te has olvidado? Ama a Dios con todo tu corazón, con toda tu pasión, porque al hacerlo, te amarás a ti mismo. El Dios interior es el sanador, y se ocupará de la química; se ocupará de todas las cosas que tú no conoces. Ámate a ti mismo como amas a Dios, y visualiza un cuerpo en pura salud, al que la enfermedad no puede tocar. O si tal vez la tiene, esa enfermedad no será capaz de permanecer. Estas cosas te las doy a ti,” dijo Yu Sha a Wo, “no solo para que vivas una vida larga, sino para que tengas el concepto de auto descubrimiento, que dice que estás a cargo de tu propia biología, usando el amor, la compasión, la dirección; bondad hacia ti mismo, y una consciencia que espera una vida larga y sanación”

Luego Yu Sha le dijo algo a Wo. Dijo: “Esta es la verdad. Yo no te diría estas cosas si no fuera así.” Y dijo: “Vete de este lugar y descúbrela por ti mismo. Empieza hoy, y sigue cada día, a dar dirección a tu cuerpo. Y no te sorprendas si te escucha, y empiezas a sentirte mejor, y hay más energía, y sabes que funciona.”

Nuevamente Wo se fue de este lugar, de esta dirección, de esta enseñanza, atónito ante lo que nadie le había dicho nunca. ¿Cómo podía él estar en esta Tierra moderna – pensó – con todos los medicamentos, y los doctores, y el conocimiento, y la tecnología, y nadie nunca le dijo esta verdad?

Eso cambiará. Cambiará porque en el planeta hay un despertar en todas las áreas. Algún día los hospitales tendrán un aspecto muy diferente del de hoy. Y cuando llegue ese día, quiero que tengan una experiencia de “ajá” de que se han sentado en un lugar donde los antiguos ya lo sabían. Nosotros descubrimos lo que ellos sabían.

Yo soy Kryon, enamorado de la humanidad.

Y así es.

Kryon

Transcripción y traducción: M. Cristina Cáffaro

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