miércoles, marzo 26, 2014

Jennifer Hoffman - 5 Signs You're On the Fence and How to Make a Choice by Not Choosing - March 25, 2014 - 5 Señales de Que Están Sentados en la Cerca y Cómo Hacer una Elección al No Elegir - 25 de marzo del, 2014

The expression ‘on the fence’ is used to describe a situation where we are undecided, unsure, confused, or simply overwhelmed by a situation and we’re paralyzed or stuck and can’t make a decision. So we sit on the fence, not making a choice for anything. It’s sometimes easier to be on the fence than it is to be in unknown (or known territory). We get into this type of situation when we
  • definitely don’t want one choice but aren’t sure about another one,
  • are afraid to move either way because we don’t want to do something wrong
  • we’re still upset, angry, or singed from a recent bad experience and don’t want to repeat it
  • or we’re just plain angry and this is how we show the world that we’re not going to participate any more.
The good part of being on the fence is we are aware of all of the potential scenarios, at least from a distance. The bad part of being on the fence is that we are standing perfectly still, not making a choice in either direction and we feel stuck. We know we’re stuck and we feel bad about it but we just can’t make up our minds about which way to turn. Does this describe something in your life? How do you know if you are on the fence?
Here are five signs that may describe a ‘fence sitting’ situation in your life:
1. You feel really stuck and you know it, but you also feel powerless in the face of what you see are the potential choices in front of you. And you don’t want anyone to know is that you are really afraid to make a choice, so you are pretending that you are time your time in assessing all of your options.
2. You have already done your best and tried your hardest, and your life is still a mess. So you aren’t going to do anything and see what happens next. Since you aren’t able to make a positive difference in your life by trying hard, you’re going to not try at all and see if that works out better for you.
3. The most recent disappointment in your life is still fresh in your memory. You have tried to laugh it off but you are really feeling bad about it.  No one knows how much it has shaken your confidence, in yourself and in your abilities, and you don’t trust yourself any more.
4. None of the options you are seeing in front of you are appealing and they all require too much effort, won’t deliver the outcome you want, and you are having a hard time believing that any one of them could have a positive or desired outcome.
5. You want someone else to make the choice for you, or wait until you have to make a choice because you think that the situation will work itself out and then the best and most obvious choice will present itself to you and you wont’ have to make a choice because only one choice will be available.
If any of these situations describe what you are feeling right now, don’t feel bad. We often find ourselves on the fence when we’re faced with an important choice or when we are afraid to make a decision. Being on the fence isn’t the problem, it’s the paralysis and fear that we suffer from when we’re on the fence, which lead to a lack of confidence and fear. Then when we finally have to make a choice, usually because we have waited so long that we can no longer avoid it, the choice is fear-based and powerless, and our results reflect that.
The best way to get off of the fence is to choose from the outcome, not from the choice. We usually don’t know what the outcome will be and since we’re scared, all choices are terrifying. But if we focus on the outcome we want, we’ll start attracting the energy that outcome requires and the choice which matches that outcome will become more clear. It’s possible too that the choice which matches the outcome we want isn’t even one of the choices we’re considering, so getting into the energy of our outcome helps create that energy in our choices. Then we raise the frequency of our perspective, shift the vibration and attract a higher potential outcome because we’re no longer in fear or afraid of making the wrong choice.
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5 Señales de Que Están Sentados en la Cerca y Cómo Hacer una Elección al No Elegir


Por Jennifer Hoffmanhttp://enlighteninglife.com


25 de marzo del, 2014






Traducción: Fara González LópezDifusión: El Manantial del Caduceohttp://www.manantialcaduceo.com.ar/libros.htmhttps://www.facebook.com/ManantialCaduceo



La expresión ‘en la cerca’ se utiliza para describir una situación donde estamos indecisos, inseguros, confundidos o simplemente abrumados por una situación y estamos paralizados o estancados y no podemos tomar una decisión. Así que nos sentamos en la cerca, sin elegir nada. A veces es más fácil estar en la cerca que estar en territorio desconocido (o conocido). Nos involucramos en este tipo de situación cuando nosotros.


§ Definitivamente no queremos una elección pero no estamos seguros de la otra,


§ Tenemos miedo de avanzar en cualquier dirección porque no queremos hacer algo mal,


§ Todavía estamos molestos, enojados o contrariados debido a una mala experiencia reciente y no queremos repetirla


§ O simplemente estamos molestos y así es cómo le mostramos al mundo que no vamos a participar más.



La parte buena de estar en la cerca es que estamos conscientes de todos los escenarios potenciales, al menos a distancia. La parte mala de estar en la cerca es que estamos totalmente inmóviles, sin hacer una elección en cualquier dirección y nos sentimos estancados. Sabemos que estamos estancados y nos sentimos mal respecto a ello pero no podemos decidirnos sobre qué camino tomar.. ¿Describe esto algo en sus vidas? ¿Cómo saben si están en la cerca?


Aquí hay cinco señales que pueden describir una situación en sus vidas de ‘estar sentados en la cerca’


1. Se sienten verdaderamente estancados y lo saben, pero también se sienten impotentes ante aquello que ven como las elecciones potenciales ante ustedes. Y no quieren que nadie sepa que ustedes realmente temen hacer una elección, así que pretenden que se están tomando tiempo para evaluar todas sus alternativas.


2. Ustedes ya han hecho todo lo posible y han hecho su mayor esfuerzo, pero su vida sigue siendo un lío. Así que no van a hacer nada y ver qué es lo que sucede a continuación. Como no son capaces de hacer una diferencia positiva en sus vidas al esforzarse, no van a intentarlo para nada y ver si así les salen mejor las cosas.


3. La mayor decepción en sus vidas está todavía fresca en su memoria. Han tratado de reírse de ella pero realmente se sienten mal respecto a la misma. Nadie sabe cuánto ésta ha sacudido su confianza, en ustedes mismos y en sus capacidades, y ya no confían en sí mismos.


4. Ninguna de las opciones ante ustedes es atractiva y todas necesitan de mucho esfuerzo, no van a proporcionar el resultado que ustedes quieren y ustedes están teniendo dificultades para creer que cualquiera de ellas pudiera tener un resultado positivo o deseado.


5. Quieren que otra persona haga la elección por ustedes, o esperar hasta que ustedes tengan que hacer una elección porque piensan que la situación se solucionará por sí sola y entonces se les presentará por sí misma la mejor y más obvia elección y ustedes no tendrán que hacer una elección porque solo estará disponible una elección.


Si alguna de estas situaciones describe lo que ustedes sienten ahora, no se sientan mal. A menudo nos encontramos en la cerca cuando nos enfrentamos a una elección importante o cuando tememos que tomar una decisión. Estar en la cerca no es el problema, es la parálisis y el miedo que sufrimos al estar en la cerca lo que lleva a una falta de confianza y miedo. Entonces cuando finalmente tenemos que hacer una elección, usualmente porque hemos esperado tanto que ya no podemos evitarla más, la elección se basa en el miedo y en la impotencia y nuestros resultados reflejan eso.


La mejor forma de bajarnos de la cerca es elegir desde el resultado y no desde la elección. Usualmente no sabemos cuál será el resultado y como estamos asustados, todas las elecciones son aterradoras. Pero si nos enfocamos en el resultado que queremos, comenzaremos a atraer la energía que requiere ese resultado y la elección que se corresponde con ese resultado se hará más evidente. También es posible que la elección que se corresponde con el resultado que queremos ni siquiera sea una de las elecciones que estamos considerando, así que entrar a la energía de nuestro resultado ayuda a crear esa energía en nuestras elecciones. Entonces elevamos la frecuencia de nuestra perspectiva, cambiamos la vibración y atraemos un resultado de un potencial superior porque ya no estamos asustados ni tememos hacer la elección equivocada.

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