Estamos en una enorme olla a presión colectiva y revuelta desde esta última poderosa luna llena. Pero esta cámara de presión está a punto de estallar, o así lo esperamos. Yo he pasado los últimos dos días tratando de comprender lo que realmente está sucediendo. Esto no es fácil para ninguno de nosotros que somos excavadores espirituales. (Ustedes saben quiénes son). Definitivamente estamos entrando en un nuevo territorio, no sólo con nuestro espíritu, sino también con nuestro cuerpo físico. Este nuevo territorio es increíblemente difícil de describir o de entender con la mente. Pero aquí tienen un par de cosas que hoy sé con certeza.
Primero, estamos a punto de dar otro paso adelante. No se trata sólo de un paso pequeño. Es uno bastante grande. Ahora estás abriendo una antigua puerta de salida. ¡Tu luz interior es la LLAVE! Pero no sabemos a dónde nos está llevando. Pero todos tenemos el coraje y la tenacidad para seguir avanzando hacia una realidad que aún no se nos ha revelado. Por cierto… “¡bien hecho!” ¡Ahora, sigue adelante!
Estamos experimentando una tremenda ola de resistencia colectiva, interferencia y contragolpe de fuentes que nos han estado utilizando como fuente de energía. Ellos saben que su suministro está a punto de ser cortado. Están luchando por su supervivencia. Su apetito por nuestra energía se ha multiplicado más allá de cualquier esperanza de sostenibilidad, como un drogadicto a punto de colapsar. Están clamando por evitar sentir los síntomas de abstinencia que saben que se avecinan. Tendrán que aprender a generar su propia energía como lo hemos hecho nosotros. No hay nada más que podamos hacer por ellos. Este será un proyecto que lamentablemente dejaremos inconcluso. Les enviamos amor y bendiciones, y rezamos para que encuentren su camino durante este tiempo.
Para nosotros, este tiempo se siente como si la realidad hubiera subido el volumen y hubiera habido un repunte en el tiempo. Nos sentimos claustrofóbicos y poco preparados en esta épica energía de tira y afloja que estamos experimentando. Nos sentimos arrastrados hacia un mundo que ya no existe a la vez que nuestro espíritu nos empuja hacia una realidad que apenas existe. Si alguna vez estuvimos en un lugar entre mundos, ésta es la versión épica de eso.
Podemos tener síntomas de náuseas, malestar estomacal y simplemente una pesada y profunda sensación de hundimiento en nuestro plexo solar. ¡Un mareo cósmico! Nos sentimos agotados, confundidos y sin saber qué camino tomar a continuación. Esta pesadez se remonta al principio mismo de la vida que se hizo física en la tierra. Esto es tan profundo que no podremos acceder a estas memorias primigenias para sanarlas. Sólo sepan que estamos sintiendo el comienzo absoluto de nuestra separación de Dios... la gran mentira o ilusión. Estamos sanando la mentira original de nuestros antiguos linajes. Somos nuestros ancestros regresando para cerrar el ciclo que habíamos comenzado hace tanto tiempo. Simultáneamente estamos sintiendo el camino a seguir para regresar a nuestra totalidad y a la luz y verdad del yo divino que verdaderamente somos.
Las limitaciones que aceptamos, las mentiras que creímos, los dramas en los que nos perdimos, los desvíos que tomamos y todas las capas de entumecimiento espiritual por las que pasamos cuando nos alejamos de la fuente para experimentar la vida física, es tan complejo, tan intensamente profundo, que en última instancia es alucinante. (Disculpen la oración ridículamente larga). E incluso en esos raros momentos en los que pensamos que entendemos la brillantez de quiénes somos, esos momentos sólo palidecerán en comparación con lo que está empezando a manifestarse.
Lo que tenemos ante nosotros ahora es nuestro próximo paso, ¡y daremos este próximo paso! Daremos este próximo paso aunque nos asuste, aunque nos cause ansiedad, náuseas y noches inquietas. Para esto es que vinimos. Hay un impulso imparable dentro de nosotros. Nada puede interponerse en este avance. Nada puede detener esta épica evolución y nuestro regreso a la luz.
Compartan por favor qué percepciones están recibiendo en estos días y cómo están navegando por este tiempo.
Traducción: Margarita Lopez