Canalización de Kryon por Lee Carroll
Retiro en Boulder, Colorado - enero 9
Un Futuro Imparable
Retiro en Boulder, Colorado - enero 9
Un Futuro Imparable
Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.
Mucho han experimentado, visto y oído en estos dos días. Por supuesto, le hablo a la audiencia frente a mí, no a los que van a escucharlo más tarde. Pero para todos ustedes, escuchando después y estando aquí, me gustaría dar un breve mensaje metafórico.
Queridos, muchas veces les hemos dado la idea de que la luz está viniendo. Y eso en sí es una metáfora, porque la luz de que hablamos es la iluminación. Y esto toma forma de muchas maneras. Podrían decir que la luz viene en sabiduría, en comprensión, entre un humano y otro. Eso no está aquí todavía. Podrían decir que la luz viene con inventos del planeta para que se pueda producir electricidad sin usar recursos, y se pueda cultivar el alimento donde antes nunca se pudo cultivar, y no haya hambre. Eso no está aquí todavía. Y así sigue y sigue, podrían decir. Algún día podría haber iluminación en lo que son sus gobiernos, y la manera en que funcionan las cosas en las corporaciones, y cambiarán la cara de todas las cosas.
Me gustaría decirles que todo eso está colgado en el Campo. Cuelga en el Campo significa que es su futuro. Para quienes están en el salón, y aquellos escuchando que tal vez no entiendan, les digo: su planeta está en un objetivo, una ruta que tiene un objetivo, y en esta ruta hay algo imparable: eso es ustedes.
Hubo un tiempo en que dije: La humanidad puede hacer esto si lo elige. Y ustedes pueden volver en el tiempo y oírlo muchas veces: que tienen libre albedrío, queridos, y si eligen hacer esto, entonces sucederá. Y en este punto, les diré: al comenzar este año, la bola de nieve está rodando y ustedes no la van a parar. Y esa bola de nieve es blanca, y es luz. Puede que lleve un poco más de tiempo para llegar cuesta abajo que lo que ustedes querrían, ¡pero yo he visto esto!, en otras civilizaciones, en otros planetas en ascensión, y algunos de ustedes han estado en ellos y lo reconocen, y sus almas antiguas ¡están aquí hoy! Porque ese era el plan: que ustedes regresarían, y tendrían suficientes vidas de experiencia para sentirlo, y recordarlo, y no tener miedo. Para ser parte de la batalla final de la oscuridad y la luz, que puede sorprenderlos por cómo se desarrolla.
Pero incluso en estos últimos dos días ven, tal vez, lo que está sucediendo en la esperanza del futuro. Por eso están aquí. Y a aquellos que escuchan mi voz, les digo otra vez más: las cosas no siempre son lo que parecen.
Al cerrar, les daré una pequeña parábola. Es una parábola de un hombre llamado Wo, no es realmente un hombre, podría ser un wo-man (N.T. man=hombre; woman= mujer), pero lo llamamos hombre porque es conveniente y lo entienden mejor. Es una parábola que extiende la imaginación de la realidad, y eso es lo que hacen las parábolas. En algunas de las mías, los llevo a planetas que no existen, y a situaciones que no pueden suceder. Pero hay una razón. Hay cosas de las que ustedes no se dan cuenta, atributos que no conocen, respecto a eso que llamamos luz. Entonces, para mostrarles qué quiero decir, les daré esta parábola.
Si preguntan, si le preguntan a un guerrero o a un soldado, ¿cómo es luchar en una batalla de noche?, les dirá que no suele hacerse así. Las batallas nocturnas, incluso en guerras actuales, funcionan con artillería; muy rara vez puede que se encuentren con otro solado durante la noche; esas luchas se pelean durante el día. Pero a veces no es así.
Si hablan con un guerrero de viejos tiempos, cuando se encuentran en el campo de batalla, y le preguntan ¿cómo es pelear de noche?, los mirará y dirá: No sabes quién está allí, y es muy difícil, un horror.
Esa es la metáfora de este planeta en este momento. Ustedes están en la oscuridad, todavía están en la oscuridad, y están librando batallas salvajemente en la oscuridad. Y esa es la disfunción, lo ven.
Los llevo a un planeta que es muy oscuro y Wo es un guerrero, y ha estado guerreando en este planeta durante mucho tiempo, con una espada muy vieja y oxidada, y ha sido enviado al campo de batalla tantas veces que pensó que era su última vez, al oír ruidos y el blandir de la espada, fue herido un número de veces y volvió a la trinchera otra vez, listo para salir y hacerlo de nuevo.
Estos cuadros son bastante tristes, bastante feos. Pero el planeta mismo era oscuro, y la luz nunca parecía llegar y parecía que siempre había una batalla tras otra, con esa espada oxidada. Lo que viene ahora puede parecer gracioso y tal vez un poco ridículo, pero apareció un hombrecito verde. Hablaba raro. Y le dijo a Wo: “Tengo un sable especial para ti.” Y Wo dijo: “¿De veas? Me vendría bien uno nuevo, porque el mío está muy viejo y oxidado. ¡Gracias!” Y el hombrecito verde le entregó eso. No parecía una espada en absoluto, hasta que apretó un botón, ¡y allí salió un sable de luz! ¡Guau! El hombrecito verde se fue. Wo supo que él iba a ganar esta batalla, porque tan pronto como encendiera eso podría golpear al enemigo y sería capaz en el campo de batalla, y ganaría esa batalla, y ya no tendría que preocuparse más; pero no es eso lo que recibió.
Cuando fue hora de que los guerreros salieran al campo y sonó la campana, y salieron de las trincheras, él se levantó en el campo y tocó ese botón, y salió la luz… y lo que vio a su alrededor, él no lo había esperado. Todo lo que nunca había visto antes, solo había oído, apareció. Y todo a su alrededor era un shock, porque ellos veían, no a él con su sable espada, sino la luz que este creaba. Y miraron alrededor, y por primera vez se vieron unos a otros a los ojos. Y reconocieron que todos vestían ropas miserables, con espadas oxidadas, incluso olvidaron lo que estaban haciendo y se vieron uno a otro como seres humanos por primera vez, y colectivamente. Sin decir una palabra. Mientras él sostenía esa luz, ellos dejaron caer sus espadas y se miraban entre sí
Todos ellos caminaban, y por primera vez podían verse unos a otros. Ni siquiera reconocían los uniformes, ni tampoco sabían por qué peleaban. Y ese fue el comienzo de la luz en ese planeta. Un hombre.
Esta es una metáfora para ustedes, tan ridícula como pueda parecer, de la luz donde no había luz. Eso es lo que reciben. No saben cuán oscuro está aquí, hasta que ven el brillo de la sabiduría que está llegando. No ven cuán oscuro está aquí, hasta que alguien llega con ideas que nunca estuvieron antes, y ustedes dicen ¿Por qué no pensamos en esto antes? Inventos que nunca antes se vieron, que no solo cambian la atmósfera y la tecnología, sino que reescriben la economía.
Esas son las cosas que suceden con la luz. Esas son las cosas que cuelgan en el Campo. En estos dos días han echado un vistazo a lo que es posible en este planeta, de modo que hago eco de lo que mi socio dijo más temprano. No tengan miedo, porque ustedes tienen esa espada sable.
Y lentamente van a entender cómo crear la luz, lo que significa, y cómo ponerla en el marco de la maestría y no del conflicto. Y cómo usarla muy amablemente, muy suavemente, muy bellamente, para iluminar áreas que necesitaban iluminarse, y ni siquiera sabían que ustedes estaban allí. Como cuando uno enciende un fósforo en una habitación oscura; no puedes ver quién es, pero puedes ver a tu alrededor.
Este es el futuro de este planeta, no importa qué les hayan dicho. Este es el futuro de este planeta, y las almas antiguas son las que, con la experiencia que tienen, lo traerán a fructificar en este planeta, en estos tiempos. No es por accidente que ustedes están aquí. No es por accidente que están oyendo estas palabras. Ahora váyanse de este lugar, o de esta grabación, y piensen en lo que he dicho, y entiendan quiénes son ustedes, y cómo el Creador ha establecido esto, y cómo ustedes han estado de acuerdo con eso y con el porqué de estar aquí.
En compasión y amor, que son las herramientas del día, los felicito por estar aquí y tomar el manto de esta vida que puede cambiar todo en el planeta.
Yo soy Kryon, enamorado de la humanidad.
Y así es.
Kryon
Transcripción y traducción: M. Cristina Cáffaro
www.traduccionesparaelcamino.blogspot.com.ar
Mucho han experimentado, visto y oído en estos dos días. Por supuesto, le hablo a la audiencia frente a mí, no a los que van a escucharlo más tarde. Pero para todos ustedes, escuchando después y estando aquí, me gustaría dar un breve mensaje metafórico.
Queridos, muchas veces les hemos dado la idea de que la luz está viniendo. Y eso en sí es una metáfora, porque la luz de que hablamos es la iluminación. Y esto toma forma de muchas maneras. Podrían decir que la luz viene en sabiduría, en comprensión, entre un humano y otro. Eso no está aquí todavía. Podrían decir que la luz viene con inventos del planeta para que se pueda producir electricidad sin usar recursos, y se pueda cultivar el alimento donde antes nunca se pudo cultivar, y no haya hambre. Eso no está aquí todavía. Y así sigue y sigue, podrían decir. Algún día podría haber iluminación en lo que son sus gobiernos, y la manera en que funcionan las cosas en las corporaciones, y cambiarán la cara de todas las cosas.
Me gustaría decirles que todo eso está colgado en el Campo. Cuelga en el Campo significa que es su futuro. Para quienes están en el salón, y aquellos escuchando que tal vez no entiendan, les digo: su planeta está en un objetivo, una ruta que tiene un objetivo, y en esta ruta hay algo imparable: eso es ustedes.
Hubo un tiempo en que dije: La humanidad puede hacer esto si lo elige. Y ustedes pueden volver en el tiempo y oírlo muchas veces: que tienen libre albedrío, queridos, y si eligen hacer esto, entonces sucederá. Y en este punto, les diré: al comenzar este año, la bola de nieve está rodando y ustedes no la van a parar. Y esa bola de nieve es blanca, y es luz. Puede que lleve un poco más de tiempo para llegar cuesta abajo que lo que ustedes querrían, ¡pero yo he visto esto!, en otras civilizaciones, en otros planetas en ascensión, y algunos de ustedes han estado en ellos y lo reconocen, y sus almas antiguas ¡están aquí hoy! Porque ese era el plan: que ustedes regresarían, y tendrían suficientes vidas de experiencia para sentirlo, y recordarlo, y no tener miedo. Para ser parte de la batalla final de la oscuridad y la luz, que puede sorprenderlos por cómo se desarrolla.
Pero incluso en estos últimos dos días ven, tal vez, lo que está sucediendo en la esperanza del futuro. Por eso están aquí. Y a aquellos que escuchan mi voz, les digo otra vez más: las cosas no siempre son lo que parecen.
Al cerrar, les daré una pequeña parábola. Es una parábola de un hombre llamado Wo, no es realmente un hombre, podría ser un wo-man (N.T. man=hombre; woman= mujer), pero lo llamamos hombre porque es conveniente y lo entienden mejor. Es una parábola que extiende la imaginación de la realidad, y eso es lo que hacen las parábolas. En algunas de las mías, los llevo a planetas que no existen, y a situaciones que no pueden suceder. Pero hay una razón. Hay cosas de las que ustedes no se dan cuenta, atributos que no conocen, respecto a eso que llamamos luz. Entonces, para mostrarles qué quiero decir, les daré esta parábola.
Si preguntan, si le preguntan a un guerrero o a un soldado, ¿cómo es luchar en una batalla de noche?, les dirá que no suele hacerse así. Las batallas nocturnas, incluso en guerras actuales, funcionan con artillería; muy rara vez puede que se encuentren con otro solado durante la noche; esas luchas se pelean durante el día. Pero a veces no es así.
Si hablan con un guerrero de viejos tiempos, cuando se encuentran en el campo de batalla, y le preguntan ¿cómo es pelear de noche?, los mirará y dirá: No sabes quién está allí, y es muy difícil, un horror.
Esa es la metáfora de este planeta en este momento. Ustedes están en la oscuridad, todavía están en la oscuridad, y están librando batallas salvajemente en la oscuridad. Y esa es la disfunción, lo ven.
Los llevo a un planeta que es muy oscuro y Wo es un guerrero, y ha estado guerreando en este planeta durante mucho tiempo, con una espada muy vieja y oxidada, y ha sido enviado al campo de batalla tantas veces que pensó que era su última vez, al oír ruidos y el blandir de la espada, fue herido un número de veces y volvió a la trinchera otra vez, listo para salir y hacerlo de nuevo.
Estos cuadros son bastante tristes, bastante feos. Pero el planeta mismo era oscuro, y la luz nunca parecía llegar y parecía que siempre había una batalla tras otra, con esa espada oxidada. Lo que viene ahora puede parecer gracioso y tal vez un poco ridículo, pero apareció un hombrecito verde. Hablaba raro. Y le dijo a Wo: “Tengo un sable especial para ti.” Y Wo dijo: “¿De veas? Me vendría bien uno nuevo, porque el mío está muy viejo y oxidado. ¡Gracias!” Y el hombrecito verde le entregó eso. No parecía una espada en absoluto, hasta que apretó un botón, ¡y allí salió un sable de luz! ¡Guau! El hombrecito verde se fue. Wo supo que él iba a ganar esta batalla, porque tan pronto como encendiera eso podría golpear al enemigo y sería capaz en el campo de batalla, y ganaría esa batalla, y ya no tendría que preocuparse más; pero no es eso lo que recibió.
Cuando fue hora de que los guerreros salieran al campo y sonó la campana, y salieron de las trincheras, él se levantó en el campo y tocó ese botón, y salió la luz… y lo que vio a su alrededor, él no lo había esperado. Todo lo que nunca había visto antes, solo había oído, apareció. Y todo a su alrededor era un shock, porque ellos veían, no a él con su sable espada, sino la luz que este creaba. Y miraron alrededor, y por primera vez se vieron unos a otros a los ojos. Y reconocieron que todos vestían ropas miserables, con espadas oxidadas, incluso olvidaron lo que estaban haciendo y se vieron uno a otro como seres humanos por primera vez, y colectivamente. Sin decir una palabra. Mientras él sostenía esa luz, ellos dejaron caer sus espadas y se miraban entre sí
Todos ellos caminaban, y por primera vez podían verse unos a otros. Ni siquiera reconocían los uniformes, ni tampoco sabían por qué peleaban. Y ese fue el comienzo de la luz en ese planeta. Un hombre.
Esta es una metáfora para ustedes, tan ridícula como pueda parecer, de la luz donde no había luz. Eso es lo que reciben. No saben cuán oscuro está aquí, hasta que ven el brillo de la sabiduría que está llegando. No ven cuán oscuro está aquí, hasta que alguien llega con ideas que nunca estuvieron antes, y ustedes dicen ¿Por qué no pensamos en esto antes? Inventos que nunca antes se vieron, que no solo cambian la atmósfera y la tecnología, sino que reescriben la economía.
Esas son las cosas que suceden con la luz. Esas son las cosas que cuelgan en el Campo. En estos dos días han echado un vistazo a lo que es posible en este planeta, de modo que hago eco de lo que mi socio dijo más temprano. No tengan miedo, porque ustedes tienen esa espada sable.
Y lentamente van a entender cómo crear la luz, lo que significa, y cómo ponerla en el marco de la maestría y no del conflicto. Y cómo usarla muy amablemente, muy suavemente, muy bellamente, para iluminar áreas que necesitaban iluminarse, y ni siquiera sabían que ustedes estaban allí. Como cuando uno enciende un fósforo en una habitación oscura; no puedes ver quién es, pero puedes ver a tu alrededor.
Este es el futuro de este planeta, no importa qué les hayan dicho. Este es el futuro de este planeta, y las almas antiguas son las que, con la experiencia que tienen, lo traerán a fructificar en este planeta, en estos tiempos. No es por accidente que ustedes están aquí. No es por accidente que están oyendo estas palabras. Ahora váyanse de este lugar, o de esta grabación, y piensen en lo que he dicho, y entiendan quiénes son ustedes, y cómo el Creador ha establecido esto, y cómo ustedes han estado de acuerdo con eso y con el porqué de estar aquí.
En compasión y amor, que son las herramientas del día, los felicito por estar aquí y tomar el manto de esta vida que puede cambiar todo en el planeta.
Yo soy Kryon, enamorado de la humanidad.
Y así es.
Kryon
Transcripción y traducción: M. Cristina Cáffaro
www.traduccionesparaelcamino.blogspot.com.ar