July Issue
I purposely delayed the release of this bulletin until Mid-July since I wanted to wait and "come down" from the amazing experience we just had in Mt. Shasta, California. Sometimes we hear about people having a mountaintop experience. Supposedly that's an experience - a personal epiphany - or a time of emotional reflection as you stand at the top of a mountain. Here was an instance, however, where just sitting at the base and gazing at the mountain gave many the same thing, and more.
We were told that our Shasta idea was an aggressive plan, but along with Elan Cohen of Shaloha productions, we decided to create three complete seminars at the base of Mt. Shasta, lasting a full twelve days. Split between the picturesque and quaint towns of Mt. Shasta and McCloud, these were channelling-intensive seminars featuring multiple guest channellers, and also a two-day interactive Lemurian Teaching Wheel workshop.
As complete as the substance and presentation of these seminars were, the mountain and the surrounding area was the real star. For years, Shasta has been on the "energy map" of special esoteric places on the planet. Mount Shasta holds the distinction of being one of the world’s preeminent sacred mountains. It is recognized as an eligible Native American cultural and cosmological property on the National Register of Historic Places. It was sacred to the inhabitants of over 7,000 years ago, and it was forbidden to climb it.
According to Kryon, and many metaphysical authors, the Shasta mountain contains some of the original ones from the stars who were part of our magnificent and sacred creation story. Even tourists who have no metaphysical interests at all, are often swept up in the grandness and energy of this very engaging mountain. Many say there is constant activity on the slopes, and lights are seen at night in inaccessible areas. It's a mystical place, and it clearly spoke to many who attended.
Each morning we were greeted by the sight of grand, stunning trees and crystal blue lakes. The sounds of the ever-present birds and glimpses of the small animals and occasional deer were there as well. Driving to the meeting areas each day gave us amazing views of the ever-changing off-worldly looking cloud formations around the mountain that are traditional for this area. Of course, sunset and sunrise were spectacular!
During each channelling session (listen to all 14 of them here), we felt "watched-over" by this sacred energy of the mountain, and it affected us all. The staff all felt that this was almost magic, and something we will remember all our lives. The channellings were all enhanced by the Shasta mountain. Many attendees sat and ate their lunches alone, while "watching" the mountain and experiencing all the love that seemed to pour from it. Needless to say, this experience was beyond anything we could have planned, since the mountain took our teaching and uplifted it in ways that touched many. This profound experience will last and last.
Yes, we will do it again. We have to. For me? I'm still waiting to "come down" from my personal mountaintop experience.
Blessings to all,
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Boletín de la Familia Kryon - Julio 2019
¡Hola!
He demorado a propósito la salida de este boletín hasta mediados de Julio porque quería esperar a "bajar" de la asombrosa experiencia que hemos tenido en Monte Shasta, California. A veces oímos sobre personas que tienen una experiencia de la cumbre de la montaña. Supuestamente es una experiencia, una epifanía personal, o un momento de reflexión emocional al estar de pie en la cumbre de una montaña. Sin embargo esta fue una ocasión en que por solo estar sentados en la base, mirando hacia la montaña, nos dio la misma cosa y más.
Nos dijeron que nuestra idea de ir a Shasta era un plan agresivo, pero junto con Elan Cohen, de Shaloha Producciones, decidimos crear tres seminarios completos en la base del Monte Shasta, que durarían doce días completos. Repartido entre las pintorescas ciudades de Monte Shasta y McCloud, estos fueron seminarios intensivos de canalizaciones presentando múltiples canalizadores invitados, y también un taller interactivo de dos días sobre la Rueda de Enseñanza Lemuriana.
Aunque la sustancia y presentación de estos seminarios era muy completa, la montaña y el área circundante fueron la verdadera estrella. Durante años Shasta ha estado en el "mapa de la energía" de lugares esotéricos especiales del planeta. El Monte Shasta se distingue por ser una de las montañas sagradas sobresalientes en el mundo. En el Registro Nacional de Lugares Históricos se la reconoce elegible como propiedad cosmológica y cultural de los nativos americanos. Era sagrada para los habitantes hace más de 7.000 años y estaba prohibido escalarla.
De acuerdo a Kryon y a muchos autores metafísicos, la montaña Shasta contiene a algunos de los originales de las estrellas que fueron parte de nuestra magnífica y sagrada historia de la creación. Incluso los turistas que no tienen intereses metafísicos en absoluto se sienten absorbidos por la grandiosidad y energía de esta montaña tan cautivadora. Muchos dicen que en sus laderas hay actividad constante, y de noche se ven luces en lugares inaccesibles. Es un lugar místico, y claramente le habló a muchos de los que asistieron.
Cada mañana nos saludaba la visión de árboles grandiosos y asombrosos y lagos de azul cristalino. Los sonidos de los pájaros siempre presentes, la visión de pequeños animales y algún ciervo también estuvieron presentes. Conducir cada día a los lugares de reunión nos daba impactantes visiones de formaciones de nubes siempre cambiantes de aspecto fuera del mundo alrededor de la montaña, que son tradicionales en esta región. ¡Por supuesto, los amaneceres y ocasos eran espectaculares!
Durante cada sesión de canalización nos sentíamos "cuidados" por esta sagrada energía de la montaña, y nos afectó a todos. El personal sentía que esto era casi mágico, y algo que recordaríamos toda la vida. Las canalizaciones fueron realzadas por el Monte Shasta. Muchos asistentes se sentaban solos a comer sus almuerzos "observando" la montaña y experimentando todo el amor que parecía derramarse desde ella. No necesito decir que esta experiencia estuvo más allá de todo lo que podríamos haber planeado, ya que la montaña tomó nuestra enseñanza y la elevó de maneras que conmovieron a muchos. Esta experiencia profunda durará y permanecerá.
Sí, lo haremos otra vez. Tenemos que hacerlo. En cuanto a mí, todavía estoy esperando "aterrizar" después de mi experiencia personal en la cumbre de la montaña.
Bendiciones para todos,
Lee Carroll
Traducción: M. Cristina Cáffaro