El mundo con el que estáis familiarizados parece estarse derrumbando, tanto personalmente como globalmente, y realmente lo está. Conceptos sobre la vida largamente mantenidos están comenzando a disolverse en la medida que la humanidad despierta a ideas más evolucionadas. Esto está sirviendo para crear una nueva consciencia mundial que pueda manifestarse en formas superiores de todo.
Cada persona evolucionada está sembrando automáticamente la consciencia colectiva universal con verdad. Cada realidad entendida añade más verdad y ayuda a disolver lo falso. Esos cambios están empezando a penetrar en la consciencia de todos, tanto de los que están despiertos como de los que no, resultando en las intensas expresiones externas de miedo, odio y resistencia de las que estáis siendo testigos. Sin embargo, también están incrementando actividades de amor incondicional.
Con el tiempo, muchos maestros se encarnaron en la Tierra con el único propósito de sembrar al colectivo para hacer disponible una nueva y superior verdad para los que estaban preparados y la buscaban. Jesús, Buddha, Lao Tse, etc, fueron solo unos pocos de los muchos maestros espirituales que alimentaron ideas de amor y de unidad en el colectivo. Vosotros lo hacéis cada vez que elegís conocer y vivir la verdad en lugar de los conceptos tridimensionales sobre la verdad.
Sólo existe una consciencia, la omnipresente Consciencia Divina, pero la humanidad ha permitido que las creencias de dualidad y separación contaminen su experiencia personal de la Única Consciencia, lo que ha resultado en el mundo tridimensional de dolor y sufrimiento, de falta y limitación que la mayoría ha aceptado como normal. Toda verdad entendida ayuda automáticamente a disolver su falso componente y añade Luz a la versión condicionada de la Consciencia Divina, hasta que luego la colectiva contendrá más verdad que falsedad.
Como todas las personas son una expresión de la Consciencia Divina, son creadores, creando en todo momento con cada pensamiento y cada creencia de acuerdo con su estado obtenido de consciencia. Los no despiertos no saben que son creadores y por eso culpan a otros de sus problemas, pero en realidad no son víctimas al igual que no hay salvadores. La evolución es la elección de libre albedrío de toda persona.
En este un tiempo tan poderoso para despertar muchos están eligiendo morir porque han entendido a un profundo nivel subconsciente que necesitan más tiempo para obtener los niveles de frecuencia necesarios para la Ascensión. Los que entienden lo que está sucediendo realmente se están regocijando porque la columna vertebral de la energía del “poder sobre los demás” se está rompiendo. Esto está tras las muchas formas de “fanfarroneo” de las que estáis siendo testigos. Los que están enredados en el miedo al cambio, como también los que temen perder su cómodo estatus de “poder sobre los demás”, están tomando acciones basadas en su conciencia limitada.
No os resistáis, queridos, porque la resistencia es lo opuesto a permitir. En cierto punto de la evolución, uno debe permitir conscientemente que el Divino YO SOY se exprese a Sí Mismo a través de ti o como tú. La rendición espiritual no es el sentido tridimensional de ser el “felpudo” de alguien, sino un estado de consciencia capaz de rendir el sentido personal y separado del ser al de YO SOY, permitiendo vivir SU vida como tú y plenamente consciente de que ESO no necesita que se le diga cómo hacerlo.
La resistencia es natural, porque durante mucho tiempo ha estado engranada en la consciencia humana. Durante vidas enteras, ambos, hombres y mujeres no han tenido otra elección que manejar situaciones difíciles con la resistencia como material de supervivencia. Sin embargo, la mayor parte de vosotros os habéis graduado más allá de ese tipo de situaciones y en lugar de eso estáis preparados para aceptar soluciones de verdad. Al igual que sólo existe una Única Consciencia, de igual manera sólo existe Una Mente, la Mente Divina. La mente humana solo es una y solo Mente Divina, pero llena de creencias condicionadas de dualidad y separación. La Mente Divina es y siempre será la única realidad, pero no puede conocerse ni experimentarse hasta que sea reconocida como tal.
La mente humana salta rápidamente en cada situación con sugerencias y guías que están basadas muchas de ellas en el miedo y empujadas por la consciencia colectiva tridimensional, por la experiencia personal, o por lo que se ha enseñado. No desestiméis ni rechacéis a la mente por intentar ayudaros en base a los conceptos de supervivencia que ha aprendido, sino comenzad amorosamente a educar y a evolucionar a la mente con el estudio y la práctica de la verdad. Abrirse más plenamente a esa Fuente infinita de información interior permite a la mente acceder a eso y no solo a la del colectivo tridimensional. La mente interpreta tu estado de consciencia. La mente es una avenida de consciencia, una faceta de tu propia naturaleza Divina, por lo que nunca intentéis reprimirla ni negarla con la falsa creencia de que es innecesaria o que se interpone en vuestro camino espiritual.
La mente humana es una herramienta maravillosa, pero no es el jefe ni la autoridad suprema que muchos creen que es. Una mente condicionada por las creencias y conceptos tridimensionales es solo capaz de presentar ese nivel de vosotros. Cuando llegan pensamientos basados en el miedo, negativos o “estremecedores”, que le llegan a todo el mundo (a veces durante la meditación), sabed que son simplemente pensamientos del colectivo y no los convirtáis nunca en vuestros, a menos que los reclaméis como vuestros. Simplemente dejadlos flotar sin darles poder.
Si descubrís que cierto tipo de pensamientos os están bombardeando continuamente podría indicar la necesidad de un análisis más profundo. Podríais mantener aún alguna vieja energía que esté en alineamiento con ese tipo particular de pensamiento. Utilizad esas experiencias como herramientas para examinar vuestro sistema de creencias, lo que luego os permitirá aclarar algo que evidentemente estáis ya preparados para eliminar.
Algunos serios estudiantes espirituales siguen resistiéndose a dejar prácticas que les han ayudado espiritualmente a evolucionar como principiantes, con la creencia de que esos rituales y prácticas deben continuar por siempre para evolucionar espiritualmente. Esto es un concepto basado en el miedo que puede bloquear el crecimiento espiritual. Llega un punto en el que la dependencia a ritos, rituales y prácticas se convierte en una barrera para más crecimiento.
Debe entenderse que no existen reglas espirituales. Las normas espirituales fueron y aún son creadas por consciencias tridimensionales con el propósito de tener poder sobre los demás, de control y de auto-rectitud. Dios no sabe nada sobre las normas espirituales del hombre. Los diez mandamientos fueron dados en un tiempo en el que la consciencia estaba muy involucionada y se necesitaban reglas. Algunos aún las necesitan, pero vosotros no, porque habéis evolucionado más allá de ellas.
Sólo existe una regla espiritual y es el amor incondicional. La Única realidad Omnipresente, Omnipotente y Omnisciente es la única regla espiritual, porque ESO es todo lo que existe infinitamente, gobernándose a Sí Misma a través y como infinitas formas, variedades e individualidades. Todo lo demás es un concepto de esa realidad.
Cuando dais permiso para evolucionar espiritualmente sois más claramente guiados. Si desde una perspectiva humana todo parece desbaratarse, confiad en que está sucediendo una panorámica mayor y dejad lo mejor que podáis que el proceso siga. La muerte de lo viejo puede ser muy doloroso a todos los niveles, y hay una gran cantidad de limpieza celular que aún está sucediendo para la mayoría en uno o en todos los niveles, físico, emocional, mental y espiritual.
Muchos llegan a creer que son fracasos espirituales cuando tras años de serio estudio y práctica todo en su vida parece colapsar. Recordad, no podéis nunca retroceder de vuestro nivel obtenido de consciencia, así que aprended a ver esas experiencias no como fallos, sino como facetas necesarias de vuestro viaje personal, acontecimientos pensados para cambiar vuestra consciencia a nuevos niveles, si lo permitís.
Las relaciones kármicas están siendo reactivadas para que sean completadas o aclaradas. Están reapareciendo viejas heridas físicas y enfermedades por la energía que fluye de ellas de la memoria celular. Están siendo sanadas relaciones de todo tipo. Los ojos tridimensionales de otros pueden ver problemas y ofreceros soluciones basadas en ese sistema de creencias, pero vosotros mismos debéis ir hacia dentro y descubrir lo que está sucediendo realmente.
Estáis preparados para dejar de buscar a otros para amar, para validación, gratitud, amistad o aprecio, etc, incluso de los que naturalmente se esperaría de ellos. Esas cualidades son cualidades de Dios, y sólo Dios puede dárselas para que ellos os las den. Fluyen a través de otros, pero nunca de humanos que no tienen eso para darlo.
Aprended a buscar esas cosas en la Fuente, el único lugar en el que existen, y luego permitid que se manifiesten como lo hagan, a veces a través de los que menos os esperáis. Cuando dejéis de buscar o de esperar esas cosas en una persona o personas en particular, y en su lugar buscarlas en la Fuente, se manifestarán de formas que nunca hubierais podido imaginar.
El mayor error de la humanidad ha estado en creer que los seres humanos pueden dar lo que sólo Dios tiene para dar. Buscar dentro todo significa reconocer que la paz, el amor, la abundancia, la armonía, la totalidad, la compañía, etc, son cualidades Divinas que pueden fluir a través del ser de uno y de otros cuando se reconocen como tal.
Todo lo necesario a todos los niveles ya está presente en el interior, y este entendimiento abre la puerta para lo que se necesita expresar exteriormente si no está condicionado por conceptos sobre cómo debe parecer o de quién debe venir.
Somos el Grupo Arturiano. 19/05/19
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Traducción: PEC
