Páginas

miércoles, noviembre 25, 2020

Sarah Varcas - La vida durante un Eclipse Lunar: Nada es lo que parece…- Noviembre 23, 2020


 

Traducción: Rosa Garcia
Difusión: El Manantial del Caduceo en la Era del Ahora
http://www.manantialcaduceo.com.ar/libros.htm
https://www.facebook.com/ManantialCaduceo



El próximo Eclipse Lunar será el 30 de Noviembre de 2020 UT, en 9º de Géminis.

Un eclipse lunar se produce cuando la Luna está llena y su luz se ve bloqueada por la sombra de la Tierra. La Luna Llena es tradicionalmente una época de fructificación y cosecha pero, cuando se eclipsa, nos habla de frutos y resultados no perceptibles a simple vista. Nada es lo que parece. Si creemos que hemos fallado, debemos considerarlo de nuevo: no todo está perdido. Si nos estamos felicitando por un éxito desenfrenado, es mejor dar un paso atrás un momento y comprobar los detalles: las cosas pueden no resultar tan positivas como parecen de entrada y es posible que se requiera más trabajo en el futuro.



Un eclipse lunar es un momento de misterio y magia que revela la cara oculta de quiénes somos y de lo que hacemos. Nos ofrece una oportunidad preciosa de comprender en mayor profundidad las consecuencias de cómo vivimos nuestras vidas. Por lo tanto, es mejor centrar nuestra reflexión en los resultados obtenidos hasta el momento y en cualquier cambio que podamos hacer para mejorar las cosechas futuras.



En parte, la Luna se relaciona con la infancia, cuando somos más vulnerables: dependemos de la protección de otros y de su estímulo sabio. Por eso, un Eclipse Lunar puede traer a nuestra conciencia recuerdos, pensamientos y sentimientos de nuestra vida temprana, iluminando su impacto sobre nosotros. Es posible que deseemos expresar un gesto de agradecimiento hacia quienes entonces nos cuidaron con tanto amor. O que debamos reconocer las heridas infligidas y el dolor causado, intencionalmente o no, por aquellos en quienes buscamos ayuda y apoyo. Quizá nos sintamos motivados a hacer ambas cosas: reconocer los esfuerzos realizados por quienes luchaban con su propio dolor y, por lo tanto, no podían satisfacer nuestras necesidades de manera efectiva. O puede ser necesario mantener la distancia con quienes dieron forma a nuestro pasado, sabiendo que es vital para nuestro propio bienestar.

Sea cual sea nuestra experiencia de infancia, puede convertirse en un tema decisivo en el momento de un Eclipse Lunar, ya que reflexionamos sobre todo lo que nos hizo quienes hoy somos. Podemos sentirnos especialmente vulnerables en los días circundantes. Las emociones pueden aflorar más fácilmente y tentarnos a juzgar nuestros sentimientos como incorrectos o innecesarios.

Si nos asalta la ira por las heridas del pasado o las presentes, es posible que nos cueste aceptar que podamos sentir odio hacia los demás o hacia nosotros mismos. Sin embargo, es vital que nos permitamos sentir, llorar, enfurecernos. La aceptación de estas emociones difíciles (y en ocasiones abrumadoras) es importante en un Eclipse Lunar. Porque a través de esos sentimientos finalmente se revela la sabiduría, ayudándonos a abrazar su mensaje e integrar su energía en nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestra alma. Si ignoramos su tacto plumoso, el inconsciente también puede hablar en voz alta. Si es así, es hora de reconocer las partes de nosotros mismos que hemos desterrado a la oscuridad, negándonos a reconocerlas por negación y miedo. Por inquietantes que puedan parecernos estas experiencias, nos preparan para una mayor libertad emocional, a medida que aprendemos a aceptar nuestros pensamientos, sentimientos y recuerdos exactamente como son. Esta es la única forma de estar en el presente mientras la Luna vuelve a crecer para dar lugar a un Eclipse Solar dos semanas más tarde.

Como tal, un Eclipse Lunar indica la necesidad de ser amables con los demás y con nosotros mismos. Nos ayuda a reconocer que la vida humana puede ser un intenso desafío y que la forma en que nos tratamos puede ayudar a aliviar algo de esa angustia. Extender una mano amiga a alguien que sufre puede crear la diferencia entre la vida y la muerte. Una sonrisa y una conversación rápida en la cola de la caja podrían alegrarle el día a alguien que vive aislado en soledad. Detenernos para oler una flor, observar los pájaros, reírnos de un anuncio divertido en un autobús… todo puede contribuir a nuestro propio bienestar en medio de las presiones que enfrentamos en la actualidad. Un eclipse lunar nos recuerda cuán vital es prestar atención a nuestro mundo interior, a nuestra vida emocional, a escuchar la tormenta interior y no empujarla con la esperanza de que finalmente desaparezca. No lo hará. Porque esa tormenta somos tú, yo y todos: sentimientos y emociones transmitidas a través de los tiempos como un bastón de relevo, negadas e ignoradas, reprimidas y evitadas, simplemente queriendo y esperando ser escuchadas.

Si deseas comprender cómo un eclipse te impacta de manera más personal, mira en qué casa cae en tu carta natal. En ella experimentarás su impacto directo; puede que los asuntos y problemas de esa casa se magnifiquen y se vuelvan más sensibles, junto con tus sentimientos hacia ellos. Cualquier aspecto que el Eclipse haga a los planetas natales, o conjunciones al Ascendente, Descendente, Medio Cielo o Bajo Cielo, influirá en consecuencia en cómo experimentamos las energías del Eclipse. Mira sobre todo los planetas personales (Sol, Luna, Mercurio, Venus, Marte y, a veces, Júpiter) y las conjunciones, cuadraturas y oposiciones, que se sentirán con más fuerza.

Es posible que las consecuencias de la actividad en la casa del Eclipse no sean tan claras como parecen al principio y que se necesite algún tiempo antes de poder evaluar con precisión el éxito de nuestros recientes esfuerzos. Los sentimientos en esta área pueden cambian sustancialmente durante el periodo del Eclipse, por lo que conviene no tomar decisiones importantes hasta que el Eclipse haya pasado. Una vez que nuestros sentimientos se hayan calmado un poco, será más fácil saber si el cambio emocional es duradero y si debemos actuar en base a él o si sólo ha sido una fase pasajera de recalibración y liberación.

Observa también la posición y condición (aspectos y fuerza, etc.) de tu Luna natal, ya que su influencia en tu vida aumentará durante un Eclipse Lunar. Los problemas que tu Luna natal refleja en tu carta podrían relacionarse con la casa donde ocurre el Eclipse. Por ejemplo, si tu Luna natal está en la casa 7 de las relaciones y el Eclipse cae en tu casa 10 de carrera y vida pública, las relaciones ejercerán un particular impacto en tu trabajo y tu actividad pública durante este periodo, y quizá descubras que otras personas desencadenan en ti fuertes reacciones emocionales durante un tiempo. Recuerda que se trata de una fase pasajera y que es mejor analizar tus reacciones cuando intentas desentrañar tus verdaderos sentimientos sobre la situación, en lugar de desahogarlos con los demás sin una reflexión más profunda.

Sin embargo, si un Eclipse Lunar nos trae a la conciencia problemas que han estado hirviendo bajo la superficie durante bastante tiempo, puede quedar muy claro que ha llegado un momento decisivo y que es necesario cortar lazos, forjar alianzas o expresar sentimientos anteriormente silenciados y retenidos. Una autoevaluación honesta puede ayudarnos a discernir si este es el caso: ¿Son las emociones de este momento nuevas para ti y te arrastran hacia una tormenta de actividad de la que luego puedes arrepentirte, o te son ya familiares pero ahora son más ruidosas e insistentes, exigiéndote que por fin des tu opinión? Solo tú puedes saberlo, y la honestidad con uno mismo se vuelve más vital que nunca.

También vale la pena considerar la casa gobernada por la Luna en tu carta natal: la casa cuya cúspide está en Cáncer. Aquí también sentiremos la influencia de un Eclipse Lunar, pero más a largo plazo que en el momento real del Eclipse. Una vez que haya pasado la temporada de Eclipses y las cosas comiencen a asentarse, es posible que veamos un cambio gradual en esta área durante los próximos meses, porque las consecuencias del Eclipse ya "se asentaron" en tu vida. Nuestras respuestas emocionales en esta área madurarán como resultado del Eclipse y obtendremos una perspectiva más amplia y sabia sobre los asuntos de esa casa y sobre la mejor manera de progresar en ellos.

Sarah Varcas