Traducción: Fara González
Difusión: El Manantial del Caduceo en la Era del Ahora
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Cada uno de ustedes es una combinación perfecta de mente y espíritu, trabajando en armonía para expandir la energía en la tierra. El espíritu elije lo que desea crear según el camino que el alma haya determinado para esta vida. El espíritu se propone la sanación y la transformación y aunque estas son sus elecciones para cada vida, es lo que la mente se propone lo que determina el resultado. Si la elección es propuesta desde el espíritu entonces la mente tiene un camino claro y poderoso para su elección. De lo contrario, la mente hace sus propias elecciones.
La mente está limitada a su experiencia de vida, la recopilación de emociones, creencias y pensamiento que siempre ha creado. Este es el camino de cada vida. Pero el propósito de cada vida es el de integrar la mente y el espíritu, para que el propósito de la mente pueda trabajar con las elecciones del espíritu para la transformación, en lugar de un camino destinado de temor. La integración se crea al equilibrar la mente y el espíritu, liberando el temor y permitiendo que entre a la realidad de la mente una vibración superior.
Pero a veces esto se ve como la necesidad de liberar la mente/ego y hacerla menos importante. El espíritu necesita la mente para la acción, al igual que la mente necesita al espíritu como apoyo, guía, dirección. Y un camino equilibrado de transformación requiere igual participación de la mente y el espíritu. Como la mente refleja la energía de la tercera dimensión, la ascensión de la mente solamente puede ser posible bajo la guía del espíritu. Esto es lo que hará hacer avanzar a la humanidad hacia la ascensión y al ser multidimensional. El espíritu es la guía de la mente para la ascensión y su deseo es el de crear una asociación igualitaria, donde ningún aspecto sea más importante que el otro y puedan trabajar al unísono, en armonía, para cumplir con el propósito de la mente con el apoyo de las elecciones energéticas expandidas a las cuales tiene acceso el espíritu.
Esta puede ser una experiencia sin esfuerzo cuando el enfoque está en la integración y no en la dominación. El espíritu no puede dominar a la mente porque esa no es su naturaleza. La mente tiene el poder de superar y dominar al espíritu pero ese no es su propósito. La mente transita por el sendero de vida y utiliza al espíritu como su navegante. Cuando se acepta el propósito de la transformación por parte de la mente y la asociación con el espíritu se comprende como la forma más perfecta y fluida para que esto suceda, el camino a la ascensión se convierte en el propósito y se dispone de elecciones ilimitadas.
Y a medida que se despliega cada paso en la experiencia de sanación y totalidad de la ascensión hacia la congruencia, aparece el camino mejor y de un resultado más perfecto para ese momento. Entonces la mente y el espíritu pueden viajar juntos como compañeros en su viaje de experiencia a la ascensión hacia frecuencias superiores y siempre estará disponible el más elevado de todos los resultados posibles.
Derechos de autor reservados © 2016 por Jennifer Hoffman. Pueden citar, traducir, reimprimir o referirse a este mensaje si mencionan el nombre de la autora e incluyen un vínculo de trabajo a: http://enlighteninglife.com